Gulshan Homestay no es solo un alojamiento para pasar la noche, sino una verdadera experiencia de explorar la vida de los lugareños. La casa está ubicada en un pueblo tranquilo, cerca de un pintoresco parque nacional, y es ideal para aquellos que desean sentir el ambiente hogareño, relajarse del bullicio de la ciudad y tocar la cultura de la región.
La casa comenzó a funcionar hace solo dos años, pero desde el principio, la familia Gulshan tomó el asunto con gran responsabilidad y amor. Aquí hay camas 10, lo que le permite acomodar cómodamente a un pequeño grupo de turistas o familias con niños. Las habitaciones son simples pero acogedoras, con ropa de cama limpia y un ambiente cálido en el que es fácil sentirse como en casa.
En la familia Gulshan viven tres: la propia dueña, su esposo y su hija adulta. Gulshan es una persona muy cálida y amable. Ella no solo recibe a los invitados, sino que los cuida, prepara deliciosas comidas caseras y comparte alegremente historias sobre su pueblo y sus tradiciones. El marido trabaja en el parque nacional, por lo que los huéspedes tienen la oportunidad única de aprender datos interesantes sobre la naturaleza local de primera mano: a menudo sugiere dónde es mejor ir para ver hermosos paisajes, plantas raras o incluso animales salvajes.
Y la hija de Gulshan está interesada en la costura popular: a veces muestra a los invitados cómo tejer adornos tradicionales o bordar adornos, y muchos turistas se van de aquí no solo con fotos, sino también con pequeños recuerdos hechos con sus propias manos.
Aquí reina un verdadero ambiente hogareño, donde eres recibido con una sonrisa, alimentado con alma y acompañado como un viejo amigo. Vivir con la familia Gulshan es una opción ideal para aquellos que buscan no solo un lugar para dormir, sino una experiencia conmovedora y una comunicación en vivo.